jueves, 13 de noviembre de 2014

CLÁSICOS BÁSICOS: 'ALADDIN'

Un cartucho imperdible bajo el sello de Virgin.


Hacía tiempo que no traíamos un clásico de esos que tanto nos marcaron hace unos años, y ya que tenemos esta sección, qué menos que de vez en cuando volver al pasado y echar unas partidillas para que la nostalgia salga a relucir. Hoy vamos a recordar un juego de acción y plataformas que se convirtió en un incunable: 'Disney's Aladdin'.


Del cine al videojuego

A pesar de los tiempos que corren, donde la mayoría de las adaptaciones carecen de fuerza y carisma suficiente para ser atractivas para los compradores, lo cierto es que hubo una época, cuando el videojuego empezaba a asentar sus bases a nivel mundial, en que uno de los reclamos era versionar las películas con un homónimo jugable para consolas, que en unas cuantas ocasiones resultaron notables.

Una de las marcas que mejor hizo las cosas en este aspecto fue Virgin, compañía que programó mu buenos títulos basados en las películas de Disney (entre otros) que vieron la luz en la década de los 90, llegando a hacer valer al estudio bajo el nombre de la "Electronic Arts" europea, aunque la versión de Nintendo fue desarrollada por Capcom, quien tenía los derechos de la película por aquel entonces para adaptación a videojuegos. 



A pesar de que comparten nombre, los juegos eran en esencia bastante diferentes entre sí, pero el tiempo ha dado la razón al desarrollo para MegaDrive y Génesis, que han visto cómo el desarrollo de Virgin se llevaba el gato al agua siendo Mejor Juego del 93 y premiado a la mejor animación.

Consolas como la propia NES (a pesar de la diferencia de versiones), MegaDrive o Génesis, vieron cómo su catálogo se nutría con juegos de plataformas con ligeros toques de acción, consiguiendo varios premios y la aceptación de crítica y público, sirviendo de ejemplo a generaciones posteriores para hacer valedora la frase de que "quien quiere, puede".

Al rescate de Jazmine 

El título nos permite controlar a Aladdín, héroe de la película, que hará lo propio dentro del videojuego. Recorreremos una serie de localizaciones que identificaremos fácilmente debido sobre todo a un diseño efectista y de buena factura, con mucho colorido, enemigos y coleccionables.

Pasaremos, por ejemplo, por las calles de Agrabah o el mismísimo palacio del Sultán, pero también visitaremos la Cueva de las Maravillas, cargada de peligros, teniendo que valernos de la ayuda de nuestros compañeros Abú y la alfombra mágica, incluso el genio en ciertas ocasiones.

Aladdín va armado con un sable que nos permite hacer ataques a corta distancia, aunque también podemos recolectar manzanas para atacar a cierta distancia a nuestros enemigos. La combinación de ambas, así como atacar desde ciertas posiciones, será crucial para mantenernos con vida, lo que hace imprescindible que conozcamos bien a nuestros enemigos, sabiendo en qué puntos son más débiles.



También tendremos varios coleccionables, como vidas, o la posibilidad de jugar fases bonus al final de cada etapa. Estas fases especiales nos ponen en la piel del mono Abú, que tendrá que esquivar jarrones, ya sea con mivimiento, o rompiéndolos con un pequeño sable que lleva armado, siendo el objetivo recolectar una serie de gemas que luego Aladdín podrá canjear en los vendedores de Agrabah por más vidas, manzanas, o fases bonus del Genio.

Estas últimas son fruto del azar, ya que se nos propone un juego en el que tres imágenes van rotando, cada vez más rápido, y es nuestro objetivo tratar de conseguir algo positivo. Si en algún momento nos sale la cara de Jafar, la némesis del juego, la fase bonus concluye.

La fidelidad por bandera

Sin duda esta ha sido uno de los grandes puntos a favor del título, donde vemos cómo todo se ha cuidado al detalle. El simple hecho de lanzar manzanas, las animaciones de los personajes que por aquel entonces hicieron la boca agua de los usuarios, y la recreación de escenarios y animaciones fieles a la película, concluyeron en un producto soberbio.

El equipo de Virgin, con David Perry a la cabeza, consiguieron un producto fresco, genial en adaptación, y realmente entretenido, después de trabajar en muchos aspectos con diseñadores de Disney, que garantizó un producto fiel a la película original. 

Destaca por encima de todo la creación de la técnica Digicel, que permitió pasar el dibujo de papel directamente a la producción animada del videojuego. Más tarde veríamos esta técnica reflejada en titulazos como 'Earthworm Jim'.

Si bien es cierto que la jugabilidad no entraña una dificultad elevada, todo lo que rodea el título es digno de darle una oportunidad si tenéis ocasión, y si sois poseedores de una Sega MegaDrive o Génesis, es uno de esos títulos imperdibles que siempre se dejan jugar.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

CLASIFICACIÓN JUEGO DE LAS PORRAS | AUSTIN 2016